El gobierno de México admitió el viernes que un grupo de piratas informáticos había obtenido archivos del ejército que contenían información confidencial, incluidos algunos sobre la salud del presidente Andrés Manuel López Obrador, de 68 años.
“Es cierto, hubo un ciberataque (…) A través de estos modernos mecanismos extraen archivos”, admitió el presidente mexicano durante su habitual rueda de prensa matutina.
“Hasta donde yo sé, este grupo ya ha hecho lo mismo en otros países. En Colombia, en Chile, creo, entonces creo que es algo que se maneja desde el exterior”, agregó.
El jueves, el periodista Carlos Loret de Mola, quien suele criticar al gobierno, dijo que el grupo de hackers Guacamaya recibió información confidencial del ejército para el período 2016-2019.
Entre los datos robados se encuentran informes inéditos sobre la salud del presidente.
Esos informes muestran que López Obrador, de 68 años, fue trasladado de su rancho en Palenque, en el estado de Chiapas (sur) el 2 de enero para ser atendido en un hospital militar en la Ciudad de México por un problema cardíaco.
“Todo lo que allí se dice es verdad y se dijo”, dijo López Obrador. “En la ambulancia que fue a Palenque a principios de enero, (fue) porque era inminente un infarto y me llevaron al hospital donde me recomendaron un cateterismo”.
El gobierno mexicano recién anunció el 22 de enero que el Sr. López Obrador se había sometido a un cateterismo cardíaco como parte de un chequeo médico de rutina, lo que generó dudas sobre su verdadera salud.
El Sr. López Obrador tuvo un ataque al corazón en 2013. El viernes explicó que toma pastillas todas las noches y revisa su salud cada tres o cuatro meses.
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