CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Las autoridades mexicanas se comprometieron el viernes a establecer puntos de control para impedir que los migrantes aborden trenes de carga y viajen a la frontera con Estados Unidos.

El anuncio se produjo el viernes durante una reunión de funcionarios de seguridad e inmigración mexicanos con un funcionario de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez.

Hay tantos migrantes subiendo a los trenes que la compañía ferroviaria más grande de México anunció a principios de esta semana que suspendería 60 trenes de carga por razones de seguridad, reportando varios heridos y muertes.

El Instituto Nacional de Migración de México no dijo dónde se establecerían los puntos de control ni cómo se disuadiría o detendría a los inmigrantes.

En 2014, las autoridades mexicanas detuvieron brevemente los trenes para deportar a migrantes. Sin embargo, no estaba claro si el gobierno planeaba reanudar estos controles.

El instituto dijo que sus agentes arrestaron a unos 9.000 inmigrantes por día este mes, un aumento significativo con respecto al promedio diario de alrededor de 6.125 en los primeros ocho meses del año. México ha detenido a 1,47 millones de migrantes y deportado a 788.089 en lo que va del año.

Los funcionarios mexicanos dijeron que estaban hablando con los gobiernos de Venezuela, Brasil, Nicaragua, Colombia y Cuba para asegurarse de que aceptarían vuelos de repatriación.

Los funcionarios de inmigración dijeron que la compañía ferroviaria mexicana Ferromex sería parte del plan de seguridad. Ferromex dijo en un comunicado el martes que había ordenado la parada temporal de 60 trenes de carga debido a “media docena de casos desafortunados de lesiones o muertes” entre migrantes que utilizaban vagones de carga.

“En los últimos días el número de migrantes ha aumentado significativamente”, dijo Ferromex, y agregó que los trenes estaban detenidos “para proteger la seguridad física de los migrantes”.

La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos dijo esta semana que se habían presentado tantos migrantes en la ciudad fronteriza de Eagle Pass en Texas que había decidido cerrar un cruce ferroviario internacional entre Piedras Negras, México.

Union Pacific Railway dijo que la línea ferroviaria reabriría a la medianoche del sábado y agregó que alrededor de 2.400 vagones en ambos lados de la frontera aún no podían moverse.