La joven mexicana Adhara Pérez Sánchez a sus 9 años ya tiene una extraordinaria trayectoria escolar a sus espaldas. Terminó la escuela primaria a los 5 años, la secundaria a los 6 años y la secundaria a los 8 años. Actualmente estudia en la Universidad CNCI en México dos carreras en Ingeniería de Sistemas y Matemáticas. ¡Ella espera convertirse en astronauta y astrofísica de la NASA y sueña con ir a Marte! Anteriormente ha dado una charla sobre agujeros negros en una feria organizada por el Instituto de las Artes y la Cultura de Tijuana.
Adhara se presenta con síndrome de Asperger y relata sus experiencias en un libro titulado No te rindas. Porque el viaje de la niña no estuvo exento de trampas. Este síndrome, que forma parte del TEA (Trastorno del Espectro Autista), ha provocado dificultades en la comunicación y en las relaciones sociales. Estaba aburrida en clase y, a veces, incluso se dormía en clase. También sufrió muchas burlas de sus compañeros de clase. Tras realizar pruebas psicométricas, resultó que Adhara tenía un coeficiente intelectual de 162, superior al de Albert Einstein o Stephen Hawkings, cuyo coeficiente intelectual se estimaba en 160.
Este fue un verdadero punto de inflexión para Adhara, que ahora podía estudiar en un entorno que se adaptaba mejor a sus necesidades. El jovencísimo estudiante es ahora uno de ellos Las 100 mujeres más influyentes de México desde Forbes México . Está a punto de unirse a las filas de la Universidad de Arizona, una escuela conocida por su programa de exploración y ciencia espacial. También está trabajando en un brazalete conectado para niños autistas que les permitiría comprender mejor sus emociones: “Estoy haciendo una pulsera que mide las emociones de los niños para que los padres puedan ver qué emociones sienten sus hijos revisándola en un teléfono, tableta o computadora”. “.
También tiene su propia plataforma online para ayudar a otros niños autistas: “No te rindas y si no te gusta dónde estás, empieza a planificar dónde quieres estar”.
“Thinker. Food advocate. Incurable coffee enthusiast. Communicator. Proud student. Amateur zombie. TV fanatic. Extreme troublemaker.”