Falta de ahorro de energía, efectos adversos para la salud, la transición al horario de verano en octubre es un ritual cuya utilidad ha sido cuestionada en México desde hace varios años. Esta semana, la Cámara de Diputados votó para terminarlo en varios estados del país, pero no en todos.

2022 es el último año de horario de verano para los estados del sur de México. Los parlamentarios mexicanos votaron esta semana para poner fin al cambio al horario de verano a partir de 2023. Por lo tanto, este fin de semana será la última vez que algunos mexicanos atrasen sus relojes una hora del sábado al domingo durante la noche. La medida, llevada a cabo por el presidente Andrés Manuel López Obrador, se basa en los pequeños ahorros energéticos logrados por el cambio de horario y los efectos negativos para la salud observados. Estos incluyen el aumento del riesgo de un trastorno depresivo, la promoción de la privación del sueño y la disminución de la capacidad de concentración.

Se mantuvo el cambio de hora para los estados limítrofes con los Estados Unidos de América

El ritual del cambio de horario de invierno se mantiene en las 33 comunidades de los departamentos de Quintana Roo y Sonora fronterizos con Estados Unidos. Comprende también los treinta y tres municipios de Baja California (Tijuana, Mexicali, Ensenada, Playa Rosarito y Tecate), Chihuahua (Juárez, Ojinaga, Ascensión, Coyame del Sotol, Guadalupe, Janos, Manuel Benavides y Práxedis G. Guerrero), Coahuila (Acuña, Piedras Negras, Guerrero, Hidalgo, Jiménez, Zaragoza, pozo). y O campo), Nuevo León (Anáhuac y Los Aldama), Tamaulipas (Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Camargo, Guerrero, Gustavo Díaz Ordaz, Mier, Miguel Alemán, Río Bravo y Valle Hermoso).

Los diputados querían hacer estas excepciones para proteger el comercio con los estadounidenses al mantener la misma zona horaria que ellos. Por tanto, cambiarán la hora dos veces al año, una en noviembre y otra en marzo.