La falta de medidas específicas y agresivas ha frustrado a algunos líderes empresariales de Estados Unidos, quienes han manifestado que existen disputas económicas entre los tres países que deben resolverse rápidamente.

“No es suficiente que los líderes se unan”, dijo Myron Brilliant, vicepresidente ejecutivo y director de asuntos internacionales de la Cámara de Comercio de EE. UU. “Es importante que veamos acciones transformadoras y cambios en la forma en que los gobiernos trabajan con el sector privado”.

Aún así, abordar la migración es una prioridad en la agenda de los líderes aquí, según funcionarios de los tres gobiernos, aunque es poco probable que se hagan anuncios de políticas importantes. La migración es un debate constante, y un funcionario estadounidense dijo que el secretario de Estado, Antony J. Blinken, está en contacto regular con el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.

La pandemia y la guerra en Ucrania siguen devastando las cadenas de suministro mundiales. La inflación y la inestabilidad política han creado una crisis de hambre de proporciones extremas en América Latina y el Caribe. Y el movimiento masivo de personas en todo el hemisferio continúa desafiando a los gobiernos de todo Estados Unidos.

Biden ha sido criticado en casa por demócratas y republicanos por manejar un número récord de inmigrantes en la frontera suroeste. La semana pasada, la administración de Biden dijo que México había acordado aceptar un aumento significativo en la cantidad de migrantes transportados por Estados Unidos a 30,000 por mes.