La empresa mexicana Femsa, que controla una de las embotelladoras de Coca-Cola más grandes del mundo y una extensa cadena de tiendas de conveniencia Oxxo, planea completar una serie de ventas de activos el próximo año para reducir su deuda, dijo un ejecutivo de la compañía.

Este año la empresa vendió sus acciones de la cervecera holandesa Heineken y del mayorista estadounidense Jetro Restaurant Depot. Los negocios aún en venta representan alrededor del 10% del plan de desinversión original de la compañía para reenfocarse en su negocio principal, dijo Juan Fonseca, jefe de relaciones con inversionistas de Femsa, en una entrevista con Reuters el jueves.

Algunas operaciones de almacenamiento, distribución, logística y refrigeración ya no se ajustan a la estrategia de Femsa y podrían venderse, añadió Fonseca.

Las acciones de Femsa han subido más de un 40% este año tras perder un 4,8% en 2022. Las ventas de activos recaudaron más de 7 mil millones de dólares en 2023.

Otras empresas mexicanas también han tomado medidas para simplificar sus estructuras escindiendo ciertas divisiones, como la emisora ​​Televisa y el conglomerado Alfa, aunque sus acciones no han recibido una respuesta tan positiva.

Femsa, que adquirió el operador suizo de quioscos Valora por 1.150 millones de dólares el año pasado, planea centrarse en sus negocios minoristas, embotelladores y de tecnología financiera (fintech).

Femsa está aprovechando la ubicuidad de sus sucursales de Oxxo promoviendo allí servicios fintech, como cuentas digitales y tarjetas de débito, dijo Fonseca.

Se espera que el negocio fintech de la compañía, llamado Spin, llegue a 10 millones de clientes para 2024, frente a los 8,8 millones actuales, dijo.

Otra posible estrategia de Spin podría ser encaminar las remesas de mexicanos en el exterior, que alcanzaron los 47 millones de dólares entre enero y septiembre, a través de las cuentas de Spin, dijo Fonseca.

Femsa informó una caída del 9% en la utilidad neta del tercer trimestre, citando el impacto de la fortaleza del peso mexicano, que según Fonseca podría compensarse con coberturas en el corto plazo.

Los crecientes costos de las materias primas y la mano de obra, impulsados ​​por los aumentos salariales anuales exigidos por el gobierno en México, son los dos mayores desafíos para el crecimiento de Femsa, afirmó.

El tamaño de Femsa le ha permitido automatizar algunos procesos y está buscando formas de reducir los costos de energía, agregó. (Reporte de Valentine Hilaire; escrito por Christian Plumb y Rod Nickel)